Tucker and Dale vs Evil (2010) es otra de esas de las que quería hablar hace ya mucho tiempo, y no porque me pareciese muy destacable; de hecho el resultado final está muy lejos de tener un estilo formal diferente al de gran parte de la comedia de horror mainstream. Pero es precisamente por eso que en su momento me sorprendió al encontrarme con una película que introdujo un concepto novedoso y mucho mejor llevado a cabo de lo que me esperaba, una idea que recicla uno de los más manidos clichés del cine de terror actual y lo transforma en una película muy divertida y redonda.
Este concepto al que me refiero (para aquellos curiosos que aún no hayan visto la cinta) es un giro a la clásica puesta en escena de otra de esas historias de paletos asesinos acabando con un grupo de guapos jóvenes citadinos, tal como ya ha hecho Deliverance (1972), Las colinas tienen ojos (1977) o la más cercana Wrong Turn (2003), pero con un gancho adicional: ¿que pasaría si estos rústicos asesinos fuesen en realidad personajes inofensivos y bondadosos, y las muertes que se producen a su alrededor no fuesen más que una sarta de terribles accidentes y malentendidos? Y exactamente eso es lo que pasa cuando el intento por parte de Dale de entablar conversación con una jovencita de ciudad da inicio a una historia de falso secuestro en la que los jóvenes visitantes se convierten en el máximo peligro para los dos protagonistas al decidir "rescatar" a su amiga de las garras de aquellos siniestros montañeses. El resultado es, de nuevo, muy divertido, y mayoritariamente inclinado hacia la comedia. De hecho si la comentamos en un blog de cine de terror es únicamente por el concepto y porque la película es generosa en su muestra de violencia, sangre, mutilaciones y desmembramientos varios.
Aunque claro está que el concepto no habría funcionado si no fuera por la manera tan eficiente cómo el elenco maneja el material. En este sentido confieso que el último re-visionado confirmó mi impresión inicial y es que no termina de convencerme la presencia de Alan Tudyk en el papel de Tucker. No porque me parezca malo su trabajo, sino porque tiene el inconveniente de que, para mí al menos, ya resultaba una cara demasiado familiar tras haberlo visto tanto en Firefly como en numerosas comedias durante la década del 2000, lo que tuvo como resultado que me saliera en muchas ocasiones de la película. Por otro lado esto se compensa con Tyler Labine en el papel de Dale, todo un descubrimiento y un actor que borda su personaje de adorable rústico a la perfección, sin caer jamás en lo que hubiera sido el fácil lado grotesco de su papel (no olvidemos que Tucker y Dale son los héroes de la película), además de que la química que comparte con Tudyk es enorme y los dos hacen una pareja cómica más que eficiente. El resto del elenco está muy bien, y desde aquí reivindico a Katrina Bowden como scream queen y a Alan Moss como rastrero y odiable villano de polo y pantalones cortos.
Evidenciados todos estos elogios, la única pega que le encuentro a Tucker and Dale vs Evil es que su formato y estilo de comedia comercial americana le ha pasado factura y ha impedido que se extienda su culto entre los aficionados de un cine de terror más extremo. Después de todo, no hay muchas sorpresas en cuanto al argumento y la cinta hace gala de gran parte de los clichés de comedia romántica que uno se podría esperar en una producción de este tipo. Esta ligereza general en ocasiones choca un poco con el humor negro de algunas secuencias y la insinuación de aspectos un tanto truculentos como la auténtica historia de slasher rural que se oculta detrás de la compra de la canaña de Tucker y Dale. Sin embargo, reconozco que esta es una queja muy subjetiva y personal que tengo. Lo cierto es que después de todo estamos ante una parodia muy bien construida de un género de terror más que explotado. E insisto: al menos es algo original que (hasta donde sé) nunca se había intentado antes por increíble que parezca. Si no la habéis visto hasta ahora, tenéis que darle una oportunidad.
Para mi tambien resultó una muy grata sorpresa hace un par de años que la vi. Definitivamente recomendable.
ResponderEliminarNo había notado el nuevo formato de reseña con varias imágenes, es un detalle refrescante. Vamos a por la reseña número 600.