Recuerdo que hace un par de años más o menos, y debido sin duda al distanciamiento que en aquel entonces tenía con el horror físico, dejé pasar The Collector (2009) pensando que sería una película del montón sin mucho que ofrecer. Resulta que tras haberla recuperado recientemente me he dado cuenta del error que cometí en su momento, ya que si bien esta película participa de forma entusiasta de muchos de los tics del subgénero de torturas que tan de moda llegó a estar en aquel entonces, no es menos cierto que se trata de una cinta muy bien hecha que demuestra que hay vida más allá de los cientos de imitadores de Saw (2004) que proliferan por el mundo del cine de terror. Resulta paradójico en este sentido que esta película haya sido concebida inicialmente como una precuela de Saw que nunca llegó a realizarse, a pesar de que su director Marcus Dunstan (quien junto a su habitual colaborador Patrick Felton es famoso como guionista no sólo de varias entregas de Saw sino también de la trilogía de Feast) es todo un conocedor de dicha saga y de los motivos por los que ha sido exitosa, algo que se nota perfectamente plasmado aquí.
La base argumental se esfuerza por reducir la película a un único escenario haciendo que el protagonista, un ex-convicto abrumado por una deuda con unos mafiosos, entre a robar a una mansión sin saber que su incursión ha coincidido fatídicamente con la llegada a la casa de un misterioso psicópata enmascarado que mantiene prisionera a la familia y que ha llenado el recinto con mortales y elaboradas trampas. La identidad del asesino tras la máscara nunca es revelada y este nunca emite palabra alguna, lo que cumple con una de las principales reglas de los slasher films al hacer del psychokiller una sombra anónima despojada de todo vestigio de humanidad, y debo decir que funciona porque estéticamente es un ser bastante siniestro que se siente como una auténtica amenaza, y al mismo tiempo carece de la omnipresencia que se suele dar a estos personajes y que resta credibilidad a otros trabajos quizás más conocidos. Con esto quiero decir que, a diferencia de otras películas de este género, el asesino no es un ser infalible e invulnerable, lo que le da cierto grado de humanidad y descontrol que lo hace más temible todavía.
El hecho de que estemos ante un único protagonista también ayuda porque la cinta evita insulsas escenas de diálogos y se concentra más bien en nuestro "héroe" intentando esquivar las trampas a la vez que busca evitar ser detectado por el monstruo que se ha alojado en aquella morada. Es precisamente este minimalismo y esta reducción de la trama a la invasión doméstica y al carácter irracional del Mal lo que hace de The Collector uno de los mejores slashers "originales" de la década pasada, y una excelente continuación para los chicos detrás de Feast (2005). Por supuesto, y en concordancia con sus trabajos anteriores, la película es sangrienta, en ocasiones cruel y despiadada con sus personajes pero al menos sorprendente en cuanto al destino que depara a algunos secundarios y que da pie a salidas argumentales que personalmente no vi venir, eso sí, manteniendo las relaciones entre los personajes al mínimo y construyendo la película desde el instinto básico de la supervivencia y un cierto sentimiento de culpa por parte del protagonista que le obliga a (por lo menos intentar) poner a salvo a aquellos que encuentra.
En fin, si quien lee esto es uno de los pocos que se perdió The Collector en su momento, es hora de recuperarla aunque sea por el hecho de que su segunda parte se ha estrenado este año. Parece mentira que los responsables de una franquicia tan repetitiva como Saw hayan podido dar pie a un slasher tan solvente y certero a la hora de tocar los botones correctos del aficionado a este tipo de terror físico. Quizás lo único que me sobra sea ese epílogo, que se siente como una imposición de una crueldad innecesaria después de la angustia que hemos sentido durante casi hora y media. De no ser por este detalle de mera explotación la película hubiese quedado mucho más redonda y limitada a esa historia de un tenso juego de gato-y-ratón entre el asesino y el protagonista. Pero con todo y eso, sigue siendo una película bastante recomendable.
Ciertamente the collector tb fue para mi una grandisima sorpresa. De lo mejorcito visto en cine de terror estos ultimos tres años, y en mi caso es mucho decir. Saludos.
ResponderEliminaresta nueva saga ya se gano un nuevo fan, por que al parecer es muy buena para los amantes del terror
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