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jueves, julio 22, 2010

Reseña: The Descent 2 (2009)

Llegamos a decir en su momento que The Descent 2 (2009) se perfilaba como una de las secuelas más innecesarias de los últimos años, y no es para menos. No se trata de que la original sea una gran película o no, sino que su historia había quedado tan perfectamente cerrada y con un final tan efectivo que una anécdota completamente nueva era probablemente la única forma de llevar a cabo una continuación con algo de dignidad. Sin embargo, no ha sido así; también recordaréis sin duda que la película de Neil Marshall tuvo un final distinto cuando se estrenó en los Estados Unidos, y es este final el que ha sido tomado en cuenta a la hora de elaborar esta segunda parte. Marshall abandona la dirección para centrarse más bien en el fantasmal cargo de productor ejecutivo, cediendo la silla principal al experimentado montador de la primera, John Harris, quien aquí se estrena en la dirección. La poca confianza inicial en este proyecto hizo que en un principio se pensara lanzarla directamente en formato doméstico, pero finalmente recibió un estreno en cines. Tras verla, considero que se trata simplemente de una continuación supérflua que no aporta absolutamente nada a lo que Marshall dejara cuatro años antes.

De hecho yo diría que para su disfrute se hace indispensable pasar por alto lo disparatada de la premisa y lo ridícula, inverosímil e involuntariamente cómica que llega a ser, cuando un equipo de rescate obliga a Sarah a regresar a la cueva (aunque esta vez entrando no por la caverna original sino a través de una mina abandonada, por algún motivo que se me escapa). El sinsentido de un policía arrastrando a la única testigo y superviviente de una masacre al lugar donde vivió sus horrores a pesar de estar en un estado casi catatónico se ve compensado hasta cierto punto por lo hijadeputa que es la protagonista, sólo interesada esta vez en escapar ella sin importarle nada más, toda una tough-chick con acento escocés incluido. Por supuesto eventualmente el equipo se encuentra con los monstruos cavernarios y la sangre vuela a chorros, esto último en sentido literal; The Descent 2 es mucho más sangrienta que la original hasta un punto hiperbólico, ya que la sangre es incluso de un rojo brillante y agresivo. Esta brutalidad tiene un problema, sin embargo, y es que inexplicablemente los monstruos (realizados esta vez con un diseño más convencional que incorpora pupilas) tardan tanto tiempo en salir como en la original, lo cual en una secuela es bastante raro. Asimismo, el carácter caricaturesco de la violencia se suma a un look mucho más pobre que da a la caverna una apariencia mucho más de cartón piedra, por lo que la trama parece un recorrido por un parque temático.

A nivel de argumento hay pocas sorpresas, ya que es básicamente lo mismo que en la película anterior, con el grupo quedando separado por culpa de un derrumbe y siendo sistemáticamente cazados por los monstruos. El elemento perturbador está en esta ocasión en el personaje del sheriff, que parece trabajar en contra de los intereses del grupo y desde el principio se la tiene jurada a Sarah de forma bastante gratuita. Las ganas de andar sobre el camino ya trazado son tales que la película incluso hace varios guiños a la original a través de la sucesiva aparición de los cadáveres de las chicas de la primera parte, acompañados por supuesto de sus muy convenientes flashbacks. Es más o menos llegados a este punto donde se produce una revelación sorpresa en cuanto a la reaparición de cierto personaje (ni tan sorpresa: ya se mostraba en el trailer) que resulta muy poco creíble y que termina por despojar a la película de todo atisbo de seriedad. El clímax es nuevamente un enfrentamiento salvaje e histérico por la supervivencia, pero sin el genuino horror de la original y mucho más tramposo y aburrido. A eso sumemos que el final es de delito; no sólo no tiene sentido (aparte de asomar la posibilidad de una nueva secuela) sino que incluso contradice la primera escena y toda la premisa de la película.

Así que si habéis disfrutado de la primera parte, es probable que ya estéis pensando en acercaros a The Descent 2. Hay, sin embargo, que bajar las expectativas considerablemente, ya que la película es básicamente lo mismo que la primera parte pero mucho más pobre y sin el buen oficio de Neil Marshall. A pesar de ser medianamente disfrutable a un nivel muy básico, queda muy por debajo de la original y es, de esto no me cabe la menor duda, tremendamente supérflua e innecesaria incluso para los estándares de una secuela.

4 comentarios:

  1. Anónimo11:02 p. m.

    Estoy muy de acuerdo, fue una secuela llena de desatinos. Su mayor pecado creo fue copiar el desenlace de la primera.

    Sin embargo estoy un poco en desacuerdo en eso de que final se tomo en cuenta de la primera para arrancar la secuela. Realmente nunca vimos a Sarah morir.

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  2. Esta muy por debajo de la original que es una gran película de horror, pero a pesar de ello se hace medianamente disfrutable, no es aburrida y tiene más sangre. El problema? su guión sin sentido y ese final tan salido de los pelos como comentas....

    saludos

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  3. Ciertamente una película innecesaria. Cuando aparece la mujer anteriormente interpretada por Lucy Liu.... bueno ahí un poco más y tiro el mando contra la tele.
    La primera está bastante entretenida y ahí nos tenemos que quedar.

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  4. Anónimo5:54 p. m.

    pues un guion un tanto soso y absurdo... y la actriz que interpreta a juno es natalie mendoza no lucy liu....

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