Que Piraña 3D (2010) de Alexandre Aja se perfila como uno de los mayores placeres veraniegos de este año es algo que está claro. Y esta vez, aprendiendo de errores anteriores, hemos decidido ponernos a tono con suficiente tiempo de antelación. Es por eso que la próxima tríada de reseñas estará destinada a cubrir las tres películas existentes de esta saga que recibe ahora el lavado de cara de las tres dimensiones. Nos servirá para cubrir la acostumbrada cuota de transición y, en mi caso particular, para dejarme el necesario tiempo de luto tras el final de Perdidos. Si quien lee esto siente una particular debilidad por exploits de Tiburón (1975), científicos amorales y mucha, mucha carne de por medio, hará bien en ponerse al día para revisar Piraña (1978), de Joe Dante, Piraña 2 (1981), de James Cameron y Piraña (1995), de Scott P. Levy, un menos conocido remake televisivo de mediados de los noventa que fue producido por Roger Corman, padre también de la original. Así que, como siempre, nos veremos en un par de días.
El film de Dante era honesto dentro de sus limitadas pretensiones y Aja siempre me ha parecido un tipo interesante, sobre todo con "Alta Tensión" y sus "Colinas tienen ojos" y "Reflejos" tenía algo a pesar de sus defectos.
ResponderEliminarLA GUARIDA DEL EREMITA