martes, diciembre 31, 2013

Brevísimo ránking de horror del 2013

Un año más, el blog se convierte en una plataforma para la que probablemente sea la entrada más egocéntrica de todo el año. Tras una votación más voluminosa que años anteriores llega finalmente el podio con lo que en Horas de oscuridad consideramos lo más destacable (que hayamos visto) estrenado durante el 2013. Sé que ninguno de vosotros querrá que esta introducción se alargue más de lo necesario, y que seguramente ya en vuestras cabezas se habrán ya hecho vuestras respectivas listas de aquello que merece llamar la atención de los seguidores del género de horror, así que vamos a lo importante. 

POSICIÓN No. 3

Tras pasar un tiempo siendo sistemáticamente ignorado a la hora de hacer esta lista, el género de falso documental/metraje hallado vuelve con V/H/S/2 (reseña aquí), magnífica secuela de la no tan destacable V/H/S, que en lo particular se convirtió para nosotros en una de las sorpresas del año al resucitar no sólo esta variante tan peculiar y rentable de cine de terror sino también el no menos singular subgénero de las películas de antología. Lo repetimos una vez más: incluso si no os gustó la original, echad un vistazo a esta segunda parte porque tiene algunos de los momentos más memorables que hemos visto en este año que se acaba.

POSICIÓN No. 2

Una de las primeras que vinos este año, American Mary (reseña aquí) merece un lugar especial aunque sea por el hecho de ser la menos comercial de las tres. Eso y por tener a Katharine Isabelle, habitual del género y que tiene aquí el que probablemente sea su mejor trabajo hasta la fecha. Una fantástica película que sigue la estela de The Human Centipede al mostrarnos un horror cuyos mayores excesos están en nuestra mente, pero que remiten de forma inequívoca al miedo a la deformidad y la (auto)mutilación. Es también una gran historia de poderío femenino contada de forma inteligente y sin un ápice de condescendencia para su moralmente ambigua protagonista. Personalmente me ha encantado y la recomiendo una vez más sin lugar a duda.

POSICIÓN No. 1

Estaba más que cantado. En realidad, si nos atenemos a lo que ha sido este blog desde que se estrenó (y vimos) The Conjuring (reseña aquí), no podía ser otra la película que ocupara el primer lugar en esta tríada de cintas de terror de 2013 que todos deberían ver. James Wan lo ha vuelto a hacer, superando todas mis reticencias iniciales y trayéndonos no sólo una gran película sino también un referente a seguir en el tema de casas embrujadas e historias de fantasmas que alcanza perfectamente el nivel de renombrados clásicos de décadas pasadas. Desde los títulos de crédito iniciales demuestra ser una película que no se anda con tonterías, horror de verdad sin un atisbo de autoironía ni meta-discurso. Imprescindible en verdad.


Estas han sido las más destacables para mí del año que se acaba. Ahora, ha llegado la hora de revelar aquella que ha resultado ganadora en nuestra encuesta anual, aquella seleccionada por los lectores de Horas de oscuridad como lo mejor del año. El resultado, creo, no sorprenderá a nadie.

MENCIÓN ESPECIAL

No suele ocurrir, pero en este caso el público lector y yo hemos sido de la misma opinión, y The Conjuring ha ganado la encuesta con un muy cómodo 29% de los votos registrados, marcando una distancia considerable ya desde el principio de la votación. En segundo lugar tenemos el remake de Evil Dead (19%), seguido de la antología de metraje hallado V/H/S/2 (8%), Insidious 2 (7%), Guerra mundial Z (6%) y un empate técnico entre American Mary y Mamá con un 5% de los votos. Milagrosamente, no hubo ninguna película que no recibiera al menos una votación.


Y ahora, finalmente, llega la hora de despedirnos. Como el año pasado, y al anterior, y el otro, os deseamos una muy feliz entrada en el calendario nuevo, y ya sabéis que aquí os esperaremos con las mismas ganas.


lunes, diciembre 30, 2013

Reseña: La maldición de Chucky (2013)

Tras casi una década de ausencia llega La maldición de Chucky (2013), sexta película de la saga y la primera en estrenarse directamente en formato doméstico. Vuelve también como director Don Mancini, creador del personaje y el único cineasta hasta la fecha en dirigir más de una entrada de la saga. Debo comenzar diciendo que no tenía ninguna esperanza de que esto saliera bien, mucho menos después de ver el trailer. Al final ha resultado sin embargo ser una de las más gratas sorpresas que me he llevado este año; no sólo la he disfrutado mucho sino que incluso me atrevería a decir que es una de las mejores entregas de la saga y una continuación muy digna en la que se nota que Mancini sabía perfectamente qué quería hacer con ella.

De entrada el argumento era una de las cosas que más curiosidad me daba, y tal como se había comentado en su momento Mancini se decide por una situación minimalista en la que el muñeco poseído por el asesino Charles Lee Ray acosa a una familia dentro de los confines de una casa en medio de una noche oscura y tormentosa, el perfecto escenario de terror que parece decirnos que por fin la saga intenta hacer no simplemente una continuación sino también una vuelta a los orígenes; esto se nota sobre todo en la voluntad por parte de la película de limitar sus referencias sólo a la Child's Play (1988) original, aunque no por eso deja de haber guiños (algunos de ellos excelentes) a otras entregas. Esto puede causar un poco de confusión en cuanto a la cronología de la saga, pero honestamente dudo que este sea un detalle que importe a muchos. La película también hace borrón y cuenta nueva al dejar un poco de lado de comedia y concentrarse más en un tono de auténtica película de terror. No lo hace del todo (Chucky nunca ha sido ni podrá ser enteramente "serio") pero por primera vez el muñeco se siente como una auténtica amenaza, algo logrado no sólo gracias a la ambientación en una tenebrosa casa como único escenario sino también por la acertada decisión de enfrentar a Chucky a una chica en una silla de ruedas.

Este minimalismo de su escenario, la escasa cantidad de personajes y el gradual misterio del inicio que dosifica las apariciones sobrenaturales del muñeco (al menos al inicio) son lo que más me ha convencido de la película. Y lo mejor de todo es que Mancini parece haber anticipado todas las dudas que los seguidores de la saga hayan podido tener, y lejos de evitarlas ha decidido enfrentarlas con valentía y sobre todo con un ingenio muy peculiar. En mi caso eran dos mis mayores preguntas: el nuevo aspecto de Chucky y la ubicación temporal de la película en la cronología de la saga. Sin entrar a revelar nada, sólo puedo decir que el nuevo aspecto del muñeco tiene justificación, y la continuidad temporal es lo suficientemente ambigua para que esta película pueda ser vista a la vez como continuación y reboot siniestro de una saga más dada al humor.

Como siempre, por supuesto, el auténtico gozo es ver a Brad Dourif haciendo de la voz de Chucky y revelando más detalles sobre su personaje a 25 años de la película original, por lo que nuevamente vemos a Charles Lee Ray antes de meter su alma en el cuerpo del muñeco. El discurso sobre los miedos infantiles presente en las primeras películas de la saga se ha dejado un poco de lado, pero la socarronería de Chucky está intacta y la vulnerabilidad de los personajes es mucho más creíble que en entregas anteriores. Evidentemente no estamos hablando de una película para todos los paladares y dudo mucho que esta sea la entrega que convenza a los detractores de este muñeco, pero honestamente me parece que recupera muchas de sus virtudes perdidas con el tiempo y demuestra (a diferencia de lo que yo creía) que sí existe vida después de la autoparodia. Y es que lo que me ha gustado más ha sido comprobar que pese a todos mis miedos iniciales, Chucky ha vuelto y sigue siendo el mismo. Recomendable sin duda, y para los seguidores del muñeco diabólico imprescindible. 

domingo, diciembre 22, 2013

Reseña: Book of Blood (2009)

Me causa una gran alegría ver que de unos años para acá ha habido un interés creciente en llevar al cine la obra narrativa de Clive Barker, quien salvo contadas excepciones había sido el único que se había preocupado llevar estas historias a buen término. Una de las que personalmente más me llamaban la atención es Book of Blood (2009), adaptación del cuento homónimo con el que abrían los famosos Libros de sangre de este autor, una de esas piezas inmejorables a las que nunca me canso de mencionar.

Ha sido una gran sorpresa ver que los responsables de esta película se hayan mantenido tan apegados al relato original, no tanto en cuanto a la anécdota, que resulta mucho más elaborada de lo que el cuento era (no olvidemos que el relato original funciona sobre todo como prólogo a la antología misma) sino en la temática y la estética de Clive Barker y la forma en cómo ambas son llevadas a la pantalla. El argumento es muy sencillo, en apariencia poco más que una historia típica de casas embrujadas e investigadores paranormales que se topan con más de lo que pueden manejar, pero los seguidores de la obra de Barker encontrarán aquí muchas de sus constantes y marcas habituales; sexualidad retorcida, mundos paralelos y un marcado fetichismo por las mutilaciones y el sufrimiento físico. En serio me ha parecido que esta película podría perfectamente estar ambientada en el mismo universo de cintas como Hellraiser (1987), Lord of Illusions (1995) o The Midnight Meat Train (2008).

Estas ideas que baraja en todo momento son lo que me ha parecido el mayor atractivo que la película tiene. Su desarrollo, no obstante, es un poco genérico, en ocasiones dosificando demasiado el tema sobrenatural y con una estética que poco a poco he visto convertida en un cliché entre la mayoría de estas producciones de terror británicas. El clímax de la película es efectivo a nivel visual pero un tanto absurdo en cuanto a la resolución que se da a los personajes, quienes pasan a aceptar un nuevo orden de ideas más o menos porque sí, sin que haya ningún tipo de transición hacia ello. Me gusta, sin embargo, que la película deje abierto el tema de contar las historias de los muertos, lo que en cierto sentido parece augurar una saga en ciernes. No sé si esta fue la intención inicial, pero lo cierto es que su coherencia estética y temática con otras películas recientes basadas en la obra de este escritor me ayuda a imaginarme que en efecto es así.

No me hagáis mucho caso en cuanto a esto; me da la impresión de que la mayor parte de las virtudes de Book of Blood son las cosas a las que me recuerda y no tanto la película en sí, que puede resultar un tanto lenta y aburrida para muchos de los que visitan esta página, y ciertamente no es tan memorable como Candyman (1992), Hellraiser u otras de las películas basadas en la obra del vigoréxico británico, pero no ha estado nada mal y me parece que tiene suficientes atractivos para convertirse, como el relato original, en un buen abreboca para historias mucho mejores.

viernes, diciembre 20, 2013

Reseña: Noche de miedo 2 (2013)

Hace un par de años Craig Gillespie nos trajo Noche de miedo (2011), nueva versión de una de mis películas de terror favoritas, como bien saben todos los que se han pasado por aquí. Ahora, de la nada, sale esta segunda parte que pasó casi desapercibida. Esto último no es nada raro ya que se trata de una cinta bastante olvidable y genérica que sin embargo tiene un par de detalles interesantes a destacar, aunque quizás no sean suficientes para merecer un puesto de honor entre los chupasangres de los últimos años. Para empezar, una de las cosas más curiosas de esta película del venezolano Eduardo Rodríguez es que a pesar de tener un número 2 en el título, no se trata realmente de una secuela de la cinta de Gillespie, sino de otro remake de la Noche de miedo (1985) original de Tom Holland. El que haya sido hecha por otra productora parece indicar que se trata únicamente de un intento por parte de un estudio rival de rentabilizar la franquicia a través de los derechos de explotación, puesto que la verdad es que no tiene absolutamente nada que ver con la del 2011 y no la referencia en ningún momento.

Comenzaré por decir las cosas que me gustan de la película: en primer lugar, me agrada que hayan intentando innovar con respecto a la original en su decisión de darle un ambiente europeo en lugar de la estética de suburbio americano que funcionó en versiones anteriores. Esto lo logran no sólo rodando en locaciones reales de Rumanía sino también gracias a sus constantes referencias a la tradición vampírica camp de la Hammer Films y otros productos populares de décadas pasadas, lo que la empuja un poco más a los terrenos del horror y la aleja un tanto de la comedia. Me gusta mucho también la escogencia de Jamie Murray como una vampiresa milf que toma el testigo ahora como la villana principal, lo que también es un obvio guiño a la primera Noche de miedo 2 (1988). Finalmente, y en lo que probablemente sea el mayor acierto del guión, me gusta cómo han reinventado el personaje de Peter Vincent, quien una vez más es un presentador televisivo, pero ahora de esos patéticos realities paranormales que tanto abundan hoy en día. Es una lástima que nuevamente este personaje, que era parte esencial de la saga original, haya sido reducido a un casi insignificante papel secundario más destinado a ser el elemento cómico.

Entre las cosas que no me gustan está el que a pesar de que tiene escenas calcadas a la versión del 85, deja muy de lado el sentido del humor de esta y no es tan hábil a la hora de equilibrar los géneros de horror y comedia. Su manejo de la sexualidad (con subtexto lésbico incluído) es muy burdo incluso para los estándares de este tipo de producciones, y el clímax es un cúmulo de sinsentidos en el que las reglas vampíricas acerca de quién vive, quién muere y cómo son rotas constantemente. La película tampoco consigue aprovechar bien sus locaciones reales y su Bucarest podría ser perfectamente cualquier ciudad anónima, lo que revela que el auténtico motivo de su ambientación no es otro que aprovechar lo barato que resulta rodar en los países del Este. En definitiva, no es la peor película de vampiros que he visto, y agradezco que haya sido corta, pero es bastante prescindible y su genérico y ya muy visto desarrollo hace parecer mejores a todas las otras versiones de esta historia, incluyendo la última, que con todos sus defectos me pareció un trabajo mucho más interesante.

jueves, diciembre 19, 2013

In progress...

Continuamos este cierre de 2013 cogiendo prisas para ver si terminamos de reseñas aquellas que se nos quedaron en el tintero. Entretanto, no está de más recordaros que tenemos una encuesta para escoger vuestras favoritas de este año que se acaba. 

sábado, diciembre 14, 2013

Reseña: Carrie (2013)

Decir que el mundo no necesitaba otra versión de Carrie es quedarse cortos; no sólo porque la película original de Brian de Palma sigue teniendo vigencia y popularidad hoy en día, sino también porque Stephen King ha sido durante años lo suficientemente prolífico como para darnos muchas obras dignas que nunca han sido llevadas al cine. Pero por lo visto alguien debe haber pensado lo contrario, así que tras un par de retrasos nos llega finalmente esta nueva versión cuya principal diferencia parece ser que es la primera dirigida realmente a un público joven; es la única hasta la fecha en la que el papel principal es interpretado por una actriz adolescente (puesto que Sissy Spacek y Angela Bettis tenían 26 y 28 años, respectivamente, cuando hicieron sus películas).

El tiempo pasado desde entonces no ha animado a nadie a hacer grandes cambios. Salvo ciertos detalles pequeños destinados a ambientar la historia en nuestra época (principalmente el tema del cyber-bullying) esta nueva Carrie sigue la misma historia de las demás, centrándose en una joven que descubre sus poderes telequinéticos y los usa para vengarse de aquellos que la han martirizado. Algo que me sorprendió de esta nueva versión fue lo fiel que ha resultado ser al argumento de la novela, incluyendo varios elementos que por lo general habían sido dejados de lado, aunque sigue estando muy centrada en la trama del culebrón adolescente y el conflicto de Carrie con las chicas populares de su instituto. Sin embargo, ya acercándonos al tramo final, la película sí que hace hincapié en el argumento de la telequinesis, aunque lo hace de forma frívola, más cercana al género de superhéroes que a la historia de terror de King. En ese sentido no deja de ser curioso que uno de los chicos protagonistas sea el mismo de Chronicle (2012), película que tiene precisamente con Carrie muchos puntos en común.

Pero claro, la principal pregunta sigue siendo qué es lo que separa a esta versión de las anteriores. En realidad, muy poco. Hay quizás una mayor preocupación por el tema de los efectos especiales, que se consigue a costa de quitarle todo atisbo de seriedad al argumento. Aunque debo reconocer que hay cosas que me agradaron y que ciertamente no me esperaba, sobre todo en el tema de las actuaciones. Chloë Grace Moretz como Carrie no lo hace tan mal como creí que lo haría, aunque muy previsiblemente la mayor parte de su trabajo aquí está en fingir ser menos guapa de lo que es. Quién por el contrario resulta sorprendente es Julianne Moore en el papel de la madre, quizás la presencia más genuinamente perturbadora y la única figura de auténtico terror de la película, muy diferente a la interpretada por Piper Laurie pero a la vez completamente coherente con el universo de Stephen King. Es de agradecer también que la cinta haya recuperado el paralelismo entre el descubrimiento de los poderes de Carrie y el despertar de su sexualidad, algo que referencia tanto a la película de De Palma como a la novela original.

En realidad, el mayor problema que le veo a esta versión es que no intenta hacer nada interesante con su argumento y no aporta absolutamente nada que no haya sido ya hecho por la versión del 76, limitándose a reproducir su trama con desgana y escasa creatividad (resulta insólito ver, por ejemplo, a una adolescente en pleno 2013 haciendo una investigación en una biblioteca). La cinta intenta suplir todas estas carencias con la secuencia final de la masacre perpetrada por Carrie en el baile de graduación, un desborde de efectos especiales que emula a la cinta del 76 añadiendo un enfoque tan hiperdramatizado que se hace complemente risible y ridículo, con la protagonista haciendo muecas y gestos que banalizan completamente todo lo que ocurre y convierten la secuencia en algo lamentable, aparte de ese "susto final" que sale literalmente de la nada. Aunque suene como un cliché, echad un vistazo a la original o mejor aún leed la novela de Stephen King, que resulta mucho más interesante que esta plana y olvidable versión. En lo personal pienso que tiene que haber un motivo más para ver una nueva Carrie que simplemente complacer a un público que no le gusta ver "pelis antiguas". 

domingo, diciembre 08, 2013

Reseña: V/H/S/2 (2013)

Una de las sorpresas del año, V/H/S/2 (2013) llega para redimir no sólo la muy prescindible primera parte, sino también los formatos de antología y falso documental, que en los últimos años han llegado a producir auténticos despropósitos (sobre todo el último). Probablemente nadie tenía menos esperanzas que yo para esta película, pero he salido de ella gratamente impresionado. No sólo es mucho mejor que la primera entrega; es realmente una muy buena antología de horror en la que cada uno de los segmentos consigue sus propios picos de calidad y el aprovechamiento de su premisa de cámara-en-mano a niveles por lo menos curiosos.

Tanto es así, que incluso el segmento más débil (aquel marco argumental que se encarga de unir a todos los demás) intenta tener una historia que se cierra, cosa que no ocurría en la primera parte. La otra diferencia en que esta ocasión sus responsables parecen haber aprendido la lección del primer V/H/S (2012) y han decidido controlar un poco más el desarrollo de los diferentes relatos dándoles un poco más de coherencia sin renunciar a probar caminos nuevos; en esta segunda parte sólo hay cuatro historias, en las cuales el tiempo de metraje es más o menos el mismo pero el tema es completamente distinto, así como las motivaciones para que la cámara esté permanentemente encendida. El primer segmento en este sentido se rinde a una premisa un tanto sci-fi al mostrarnos un ojo artificial con cámara incorporada, pero incluso esta idea se presenta de forma razonablemente verosímil.

Es imposible, por supuesto, no comparar las historias entre sí, y en este sentido el público ha sido casi unánime en decretar el segmento dirigido por Gareth Evans y Timo Tjahjanto (conocidos por The Raid (2011) y Macabre (2009), respectivamente) como el mejor de los cuatro, y es algo con lo que es difícil estar en desacuerdo. De hecho, este segmento ambientado en Indonesia perfectamente habría podido ser adaptado a un largo y hubiese sido una de las mejores películas de terror de este año. Enhorabuena también a Gregg Hale y Eduardo Sánchez, que demuestran que todavía se puede sacar algo nuevo de lo zombi a estas alturas del calendario.

Y ya para finalizar, una de las mejores cosas que para mí tiene V/H/S/2 es que todas las historias dejan espacio a elementos cómicos y ninguna es cien por cien seria. Este detalle, que en otras manos quizás hubiera restado fuerza al conjunto final, está sin embargo muy bien llevado e incluso resalta la fuerza de algunas de las escenas más terroríficas, de las cuales sin duda alguna hay. Cuatro historias, cuatro tipos de horror distintos, pero todas con un gran potencial que la convierten fácilmente en una de las piezas más disfrutables de este año que se acaba. Incluso si os pasó como a mí y el primer V/H/S no os convenció para nada, echadle un vistazo a este que no os arrepentiréis.

viernes, diciembre 06, 2013

Reseña: La matanza de Texas 3D (2013)

La séptima entrega en la saga de La matanza de Texas es borrón y cuenta nueva, cosa que no debería sorprendernos ya que ese es el estado natural de prácticamente todas las encarnaciones que han salido después de la original de Tobe Hooper, salvo en un par de ocasiones en las que los responsables sí que se atrevieron a hacer una secuela. Esta vez, y exactamente una década tras el remake de la Platinum Dunes (al que visto lo visto me han entrado ganas de volver), llega La matanza de Texas 3D (2013), una continuación directa de la primera parte realizada casi cuatro décadas después, y que ignora por completo todas las demás entregas buscando ser la continuación definitiva de la original, ahora con el gimmick de las tres dimensiones incorporado.

Destacando primero lo bueno, la película tiene unos primeros quince minutos excelentes, que funcionan como un macabro epílogo de la original del 74 en el que los miembros sobrevivientes de la familia Sawyer se enfrentan a una turba furiosa. Esta secuencia sirve no sólo para cerrar el primer capítulo sino además para borrar de un plumazo todas las continuaciones que la película ha tenido, aunque se nota cierta reverencia hacia el camino andado previamente al incluir sendos cameos de Gunnar Hansen (el Leatherface original) y Bill Moseley, inolvidable por su participación en La matanza de Texas 2 (1986). Lástima que tras este espectacular inicio la película se desinfle sin remedio. No exagero; si bien no esperaba que este nuevo e innecesario reinicio fuese una buena película, nunca me imaginé que llegaría incluso a proyectar una luz positiva sobre el remake del 2003, que con sus carencias al menos tenía un estilo y estética propios.

La matanza de Texas 3D, por el contrario, se rinde a un formato de horror juvenil de toda la vida en el que no hay sorpresa alguna y al que fácilmente hubiésemos podido dar cualquier otro título. Una vez más se comete el error de intentar convertir la saga en un slasher convencional, esta vez poniendo a un Leatherface solitario que al prescindir de la familia de caníbales tira por la borda lo que probablemente es el elemento más reconocible de la saga. Se repite una vez más el mismo esquema de jóvenes citadinos en un ambiente rural hostil que deben enfrentarse a un terrible asesino enmascarado y van muriendo de uno en uno. Encima la película es parca en cuanto a violencia, y únicamente puedo destacar aquí a su guapísima protagonista, Alexandra Daddario, estrella juvenil en alza gracias a las películas de Percy Jackson que es una seria contendora a la más hermosa final girl en muchos años.

La edad de los protagonistas trae a colación algo que ya muchos han comentado y es la inconsistencia cronológica de la película, que insiste en ser una secuela ambientada en tiempos actuales (hay smartphones) pero que supuestamente ocurre unos veinte años después de la original. Este detalle, que parece una tontería pero llega incluso a distraer de la trama, no es más que otra muestra de desidia de una película que parece haber sido hecha a golpes y sin ningún interés por hacer algo interesante con una franquicia que merece un mejor tratamiento que el que ha tenido últimamente. Si bien esta vez al gigantón de la motosierra no le quitan la máscara, sí que lo despojan de todo su interés al hacer de él un asesino genérico que en poco se diferencia de tantas otras historias de matarifes anónimos que han pasado por aquí. Es una lástima que la película no haya conseguido estar a la altura de ese prólogo que consiguió, como mucho, hacerme querer ver de nuevo la original. No voy a recomendarla aquí por ser la respuesta obvia, así que para aquellos que quieran ver un mejor ejemplo de jóvenes perdidos en el hostil ambiente de la América profunda les invito a que echen un vistazo a La casa de cera (2005), una película que curiosamente toma muchos elementos de la saga de TCM y que sin duda está mucho mejor que esta insípida vuelta a los orígenes.

domingo, diciembre 01, 2013

Se acaba el año y hay que meterle prisa a esto

Llegamos al último mes del 2013, un año parco en actualizaciones pero fructífero en cuanto a actividades que nos han mantenido alejados de este blog por más del tiempo del que hubiésemos querido. De todas maneras, y como en otros momentos, siempre nos queda el espíritu decembrino como la última excusa para ponernos manos a la obra y haceros llegar a todos el que probablemente sea el más esperado post anual de Horas de oscuridad: la inevitable encuesta a los lectores acerca de las películas de terror que más han disfrutado este año. Como en otras ocasiones, os presento aquí quince alternativas de las cuales tenéis que escoger tres, y como siempre, aquella que resulte ganadora obtendrá una mención especial junto al más que inevitable podio en el que expondré aquellas que yo considero las más destacables de las que he visto.

Sí, evidentemente me estoy dejando muchas por fuera: algunas de ellas no las he visto y otras simplemente no considero (en lo personal) que reúnan un mínimo de calidad necesario para ser tomadas en cuenta. De todas formas, ya sabéis perfectamente que podéis sugerir incluso películas que no se encuentren en esta lista... siempre y cuando sean del 2013. Por mi parte, emplearé los siguientes días en apurar el resto de reseñas de este año que se me han quedado en el tintero, incluyendo las cinco películas que están aquí y que no han pasado por la página aún.

Así que ya saben, tienen hasta el 30 de diciembre para votar. Podéis también compartir la encuesta con quien sea. La dejaremos también en la barra lateral hasta el día indicado.